Tener mascotas es bueno para la salud mental y emocional

Tener mascotas es bueno para la salud mental y emocional

¿Te ha pasado que estás aburrido y por alguna razón parece que tu perro o gato lo sabe?
En ese momento se acerca a ti, te brinda una caricia o, con cualquier otro pequeño acto de amor y ternura, te recuerda que está ahí y te acompaña. Las mascotas tienen el poder de hacerte sentir mejor solo con su presencia.

Según numerosos estudios realizados con animales y seres humanos, basados en su interacción, los peluditos ayudan a que una persona se recupere de una enfermedad o sobrelleve un tratamiento con más bienestar y calidad de vida. Quienes sufren enfermedades cardiovasculares tienen más probabilidad de que mejore su presión arterial y de que sus cuadros de estrés y ansiedad también sean más positivos.

Los animales también son una fuente de tranquilidad enorme para quienes padecen depresión y otras afectaciones emocionales, lo que demuestra por qué tener mascotas es bueno para la salud mental. Conoce  las razones por las que tu perro o gato, además de regalarte momentos increíbles en familia, te conmueve, te hace sentir mejor y motiva a ser más feliz.


¿Por qué tener mascotas es bueno para la salud mental y emocional?

  • Su compañía impacta positivamente en la presión arterial
  • Fomentan las relaciones sociales y el sentido de la responsabilidad
  • Aportan a la reducción del estrés y los dolores musculares
  • Motivan la expresión de pensamientos y sentimientos
  • Ayudan a disminuir los síntomas de la depresión
  • Retan a las personas a tener más energía, ánimo y disposición

Aunque es muy positivo tener mascotas, también hay que tener cuidado cuando estas se convierten en hijos para las personas. No es que sea problemático, pero es importante recordar que los animales son animales y como tal tienen necesidades particulares que los seres humanos deben respetar.

Por otro lado, hay que tener precauciones cuando las mascotas y los niños interactúan puesto que nunca se sabe qué acción haga sentir amenazado al perro o al gato y produzca de su parte una reacción violenta hacia un pequeño. Por más calmada que sea la mascota, es esencial estar preparado y ser responsable como padre, familiar o acudiente.


Artículo tomado de: SURA

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